Nuestra experiencia en el Werribee Open Range Zoo, Australia
Nuestra experiencia en el Safari de Werribee Open Range Zoo de Melbourne, Australia no fue precisamente lo que esperábamos. Asumimos el error de haber seguido las ideas de los Aussies que nos recomendaron pasar por la reserva animal a campo abierto que no es tal.
Lo promocionan en parte como un safari en Australia, con tan solo buscarlo en Google las fotos que aparecen nuestra muestran una reja, una valla o una separación. En prácticamente todas ellas nos vemos enfrascados en una presentación de safari con camiones en donde los visitantes pueden disfrutar de esta reserva. y desde muchos ángulos o perspectivas, no deja de ser un zoológico más pero glorificado a través de un espacio un poco más amplio de lo normal.

No nos inmiscuimos en política ni activismo, pero sinceramente no nos gusta el concepto del Zoológico como tal, y esta visita terminó siendo ni más ni menos que eso mismo. En principio entendemos que el objetivo del lugar es conservar especies en peligro, no somos sordos a la misión, pero sinceramente lo que vimos no fue lo que esperábamos.
El parque, los costos y cómo llegar a Werribee
Estábamos alojados en el distrito financiero de Melbourne en dos hoteles diferentes, Four Points by Sheraton y en el Intercontinental Melbourne by IHG. El área del segundo es perfecta para la visita a Melbourne, estamos en el espacio neurálgico como para movernos y disfrutar lo mejor que Melbourne puede ofrecer como ciudad, y para todo lo demás tenemos Uber.



Y así fué como nos movilizamos, Uber para todos lados. Lamentablemente, con la ubicación también llegó el cáos de tránsito. La rápida expansión de la población en Melbourne se hace notar con calles anegadas por las tardes y en las mañanas.
El Uber tiene un costo aproximado de USD 36 desde el centro de Melbourne, pero para ser un viaje que se puede dividir entre cuatro personas, el costo era menor. Está la posibilidad de tomar el tren y una combinación de transporte público, pero debido a la distancia y el costo total, decidimos optar por el Uber.
La opción del tren o el bus toma unos 35 minutos mientras que el Uber puede llegar a ser entre 20 y 40 minutos dependiendo el nivel de congestión vehicular.
Lo cierto es que una vez que llegamos, desembolsamos unos USD 25 por persona para obtener el ingreso al parque. No es que el costo de $25 me fuera a dar las esperanzas de un safari real, pero creo que mis expectativas estaban más altas de lo normal debido a la insistencia de los locales por nuestra visita a dicho espacio.
Caminata por el área de la flora y fauna autóctona
Una vez ingresados nos dirigimos hacia el lado izquierdo, directamente a través del pasaje de flora y fauna australiana. La caminata estuvo plagada de carteles que nos avisaban sobre las serpientes y otros potenciales peligros que tan solo se convirtieron en una gran cantidad de pasto y arbustos para ver.


Claro que vimos un avestruz, algunos wallabies y no mucho más que un Koala colgado de un poste artificial creado para ellos. El resto brilló por su ausencia y el calor nos pegó duro.
No quedamos impresionados con este área, por lo que tomamos el camino de regreso hacia lo que esperábamos fuera la atracción principal, tomar un camión para experimentar el área de safari que no era tal. Nuestro error claro está.
Werribee al estilo safari ¿o simple Zoo enmascarado?
¿Será que esperábamos demasiado? Lo cierto es que lo que vimos fue una acumulación de animales en un área amplia pero suficientemente limitada, en donde cada especie estaba con los suyos y nada más. Todo demasiado ordenado, ¡ah… la naturaleza ordenando la vida silvestre!



No, en serio. Podríamos describir lo experimentado como múltiples montículos de tierra en donde cada especie se agazapaba a hacer de las suyas, nada más, nada menos. Lo que era un safari en el Werribee Zoo tenía la intención de serlo por el método de transporte y la falta de barreras reales entre los animales y la gente, pero si la espontaneidad de la vida silvestre en su hábitat.
En la primera parte encontramos camellos, antílopes, algún avestruz y otros animales medianos haciendo de las suyas, en su propio espacio. En el segundo nivel del Werribee al estilo safari podemos ver no solo a las jirafas haciendo de las suyas, sino también a las cebras y a tres pequeños rinocerontes que no demostraron mucho entusiasmo con nuestra visita, y no los culpo.
Las fotos que no saqué en el Werribee Open Zoo
En un momento decidí cortar las fotos, los gorilas en el centro de la atención en una especie de isla artificial en el centro del Werribee parecían tener lo mejor del lugar. Por otro lado, las chitas, los perros salvajes y los leones no tuvieron la misma suerte.


La chita tenía una invitación al deseo en un espacio reservado tan solo para dicha especie pero con vista a todos los animales que descansaban del otro lado de una cerca. Es decir, miraba pero no podía tocar. Un safari, en el Werribee Zoo u en otro, debería tener a los animales libres, incluso a los depredadores. No es el caso.
Los perros salvajes estaban alojados en un espacio del tamaño de un minigolf estándar, mientras que los leones estaban en un espacio típico de un Zoológico. Los Hipopótamos y otros animales corrían la misma suerte, no había mucha diferencia entre un Zoológico y Werribee.
Conclusiones sobre el parque/safari de Melbourne
El conservacionismo tiene un precio, pero el Werribee no nos pareció más que otro zoológico glorificado. No es que esperábamos un safari real por $25, pero sí un espacio en donde más animales tenían la posibilidad de un ambiente menos restrictivo. De alguna manera, un tipo de vida silvestre en donde la naturaleza pudiera meter un poco más de mano.
Es altamente subjetivo lo que digo y también lo que esperaba del mismo, lo cierto es que nadie quedó a gusto con el lugar y no hay demasiado que separe a Werribee de un zoo regular, y si están pensando en visitarlo, quizá quieran tomar nuestro punto de vista como contrapunto de lo que se ve online, fotos en donde rara vez se nota un vallado o cercado.